Nube y Agua

Nube y Agua
El desapego de las nubes...la humildad del agua

martes, 7 de febrero de 2017

Deprimente





   Llevo demasiado tiempo sin publicar en el blog. No es que falten temas, me temo que lo que falta es ilusión por parte de un servidor, o tal vez es que los años van poco a poco carcomiendo las neuronas que se activan con la indignación porque piense que para qué voy a escribir algo. Uno es consciente que un humilde blog que muy poca gente lee no tiene capacidad de cambiar el mundo. Escribía más bien como desahogo, por sacar de dentro de mi lo que no podía manifestar en los ambientes que me muevo  habitualmente. Una especia de terapia, vamos. Pero es que ya la indignación va siendo sustituida por "esto es lo que hay" y como decía el bueno de Epicteto más que preocuparme por las cosas que no puedo cambiar me debería centrar en lo que está a mi alcance, mi pensamientos, mis emociones mis "neuras" mis adicciones, mis palabras, mis actos... Hay ahí un buen campo para desbrozar que necesita casi dedicación completa. Además cuando limpias alguna parcela la maleza vuelve a crecer en otra desaforadamente. Un sin vivir, vamos. Pero bien sea por impotencia o por racionalización creo que es una labor imprescindible. De hecho me parece que si no se empieza por uno mismo, (que unos mismo siempre lo tiene uno a mano), lo de arreglar el mundo es complicado. Incluso creo que a veces, se orienta uno en esto de cambiar el mundo mientras vivimos internamente los mismos defectos que queremos erradicar fuera.
   Pero en cualquier caso ambas actividades (dentro/ fuera) no son excluyentes incluso creo que una puede potenciar a la otra (y tambien se pueden anular mutuamente).
   Algo que me llama la atención poderosamente y que me quita las ganas de moverme es la pasividad que como sociedad mostramos ante lo que está pasando a nuestro alrededor. Yo pensaba -ingenuo de mí- que la gente no se movía por falta de información. Pero ¡que va!. Creo que nunca como en estos tiempos la información sobre la corupción galopante que existe en nuestra clase dirigente es mayor y más asequible al que la quiere ver. Pero es que veo , con asombro, que en general, se mira para otro lado, dejando que prosigan desvalijándonos. El caso más reciente es el de las subidas de la luz. Estamos marcando records de precio en las tarifas eléctricas, (una forma de tranasvasar rentas de las clases medias y bajas hacia las élites extractoras) y no pasa nada, pero nada.
   Estamos viendo como aquellas pomposas declaraciones de la Cumbre de Paris se quedan, como era de esperar) en papel mojado y seguimos tan tranquilos. Se informa de descensos del hielo ártico históricos, de anomalías de temperaturas de más de 20º grados C en las zonas árticas y la gente sólo se preocupa del Gran Hermano o cosas similares. Comprendo que estas anomalías pillan lejos y todos los días tenemos problemas más cercanos y urgentes, pero es que de seguir así esto se va al traste en 10/20 años y no digo que seamos responsables, pero sí cooperantes.
   Nada. nadie se mueve. Nos hemos rendido, o como la rana que estaba cociendo poco a poco en la olla no somos conscientes  del colapso que se nos viene encima. Los medios nos hablan de la recuperación de la economía, de que se venden más coches, de que aumenta la gente que come en los restaurantes, incluso de que el ladrillo se recupera... Vivimos en una especie de gran ignorancia orgullosa y voluntaria hacia los graves problemas migratorios medioambientales y sociales que ya se están produciendo. Aumentan radicalmente las desigualdades y vamos a lo nuestro no vaya a ser que perdamos lo que tenemos. Nos dejamos hacer...
   No cabe duda que los que han planificado esta operación de adormecimiento de la población son gente muy hábil
  Nadie se mueve. Bueno, nadie no. La imagen de arriba es un ejemplo de que la gente sí se mueve y se mueve con pasión... para animar a los jugadores del Atlético de Madrid al llegar al hotel de concentración la pasada semana antes de su partido con el Barcelona F.C. El futbol como canalizador de la rabia de la sociedad.
   Deprimente.

2 comentarios:

  1. Leyendo tu entrada de hoy me doy cuenta como muchas otras veces que estoy muy de acuerdo con lo que escribes.

    Yo me desahogo disfrutando de la naturaleza mientras puedo.

    En cuando las discusiones de cómo mejorar el mundo: suelo pararme antes de dejar demasiada energía en ellas.

    Un abrazo

    Por cierto, ya añoraba tus entradas.

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  2. Gracias Erna por tus comentarios!
    Yo también procuro desahogarme como tú disfrutando de las pequeñas, aunque grandes, maravillas que nos rodean y que no solemos valorar como se merecen porque siempre están ahí...
    Y también me está pasando algo parecido a tí. Creo cada vez más que hay pocas soluciones para cambiar el mundo. Basta hablar con la gente normal para darse cuenta que no está dispuesta a llevarse un disgusto por ver la realidad. En cualquier caso siempre queda la acción individual, no como solución sino como comportamient coherente, intentando "mejorar lo que toques, (que no siempre es fácil)
    Un abrazo
    j

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