Nube y Agua

Nube y Agua
El desapego de las nubes...la humildad del agua

jueves, 23 de octubre de 2014

Manchas solares II

  Hoy ha hecho un día despejado con un cielo muy limpio y he podido encontrar un rato para que el "Butanito" pudiera ponerse a trabajar y sacase unas nuevas y algo mejores fotos de las grandes manchas solares. He hecho unas tomas a f10 y otras a f5 con un reductor de focal, para que cupiese entero el disco solar en el campo de visión. Desgraciadamente el sol estaba más cerca de lo que hubiese querido del tejado y el calor desprendido por éste producía bastante turblencia , degradando las imágenes. Aún así, algo ha salido.



el "Butanito"
   Ahora hacer una foto de una mancha solar no genera grandes problemas, pero cuando el Sr Galileo Galilei allá por 1610 enfocó su telescopio al sol y las vió... se metió en jaleos con la Santa Madre Iglesia. 
   Aunque ya los chinos las habían observado  y tenían reseñas sobre ello, en aquella época internet era más lento que un piojo en alquitrán y entre lo lejos que estaba china y eso del idioma... a Europa no llegaban sus descubrimientos. La Iglesia mantenía que los cielos eran inmutables, perfectos, por lo que ver manchas en el sol  sólo podía ser cosa del demonio que había embujado el telescopio, (como se ve la Iglesia siempre ha sido muy cachonda a la hora de las argumentaciones científicas). O sea que a Galileo le debieron de decir eso de "¡pollito la que has liao!". Pero no acaba ahí la cosa. El Sr. Cristophe Scheiner en 1611 resulta que utilizando un telescopio, ¡también la ve! Afortunadamente Scheiner era jesuita y evitó publicar en principio su descubrimiento por que sabía muy bien que los cielos son inmutables y le podía caer una buena. Bajo pseudonimo si dio noticia del descubrimiento, pero lo achacó a planetas que pasaban por delante del sol...
   Galileo se mantuvo en sus trece y el Santo Oficio tuvo finalmente que intervenir, porque no paraba de perturbar la inmutabilidad de los cielos, defendía que la Tierra no era el centro del Universo y otras barbaridades así. En fin, murió ciego y preso en su casa de Arcetri, a pesar de que había abjurado de sus ideas.
   Pero la historia no acaba aquí. ¡Tiene un final feliz! La Iglesía se retractó y Juan Pablo II rehabilitó a Galileo... ¡359 años después!
  Y nos quejamos que la justicia española es lenta...
   
 

8 comentarios:

  1. no hay mejor cura de humildad que un poco de astronomía. Por ejemplo, todas las estrellas, todas, las que se ven a simple vista, por clara y oscura que esté la noche, son las de nuestra galaxia. Casi ná

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  2. Tienes razón. La Astronomia es la ciencia de la humildad. Cuando uno tiene agobio por "grandes problemas" basta mirar al cielo en una noche estrellada e imaginar como se verían nuestros problemas desde cualquier estrella visible.
    Desde la más cercana, Rajoy sería imperceptible. Es más, no se vería ni a Arias Cañete (ni a su patrimonio...)
    ¡Qué pequeñicos somos!

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  3. Jajaja. Las manchas solares tienen el mismo color que la tapa del "butanito".

    No en serio, gracias por las fotos y la info.

    Un abrazo y buen finde.

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  4. Que bueno!, a mi me recuerda cuando a veces en la yema de los huevos hay manchas de sangre! Y los datos que aportas son muy interesantes
    saludos

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  5. Interesante post Unsui, el relato muy ameno y hasta divertido (a pesar de las crueldades de la santa...) muchas gracias por compartirlo el butanito mola de verdad.

    Un abrazo JJ

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    1. Me alegro que te haya gustado Xaro
      Bss y gracias de parte del "Butanito"

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