Nube y Agua

Nube y Agua
El desapego de las nubes...la humildad del agua

jueves, 20 de junio de 2013

De apellido Sexpunctata...¿y de nombre?


   Mientras paseo a la perra suelo ir mirando los bordes del camino cuyas plantas van cambiando a lo largo de la estaciones. Muchas entradas del blog están basadas en estos paseos perrunos. Hoy mientras la perra se decidía a realizar su "impacto medio ambiental" he visto meciéndose en una planta muy agitada por la brisa matinal el escarabajo rojo que no sé si es una Lachnaia sexpunctata o una Clytra sexpunctata, (está claro que lo de "sexpunctata" lo clavo). 
   Me he pasado un buen rato intentando que en la pantalla del teléfono se enfocase el bichito, pero como el teléfono tiene un enfoque que más que automático es sexual, (enfoca lo que le sale de los....) no había forma. Enfocaba todo menos el escarabajo. 
   Pero cuando ya daba el safari fotográfico por perdido, otro escarabajo, sin que yo le dijera nada, se ha posado en mi mano, ¡ahí se que enfocaba el teléfono!. Como si supiese lo que quería, ha ido, igual que un modelo en la pasarela, girando para que pudiese verlo por todos lados, lo que me ha permitido fotografiarlo a placer. Ha sido uno de esos momentos místicos.
   Volando, estos bichos no ganan ningún premio. Abren sus élitros rojos, que protegen sus alas y se lanzan al espacio volando con poca gracia hasta que alcanzan una planta. Es curioso que a pesar de volar de pena y aterrizar "a puñaos" afinan bastante. Visto de cerca se comprende tanta precisión. Vuelan con sus patas por delante que están provistas de ganchos y cuando se topan, (que no posan), sobre una planta se agarran con todos su ganchos.

   En la naturaleza, los colores llamativos, como los de el "sexpunctata", (abandono la idea de ponerle el nombre ante la duda y me quedo con el apellido que es bastante evidente), intentan convencer a los posibles depredadores de su carácter peligroso si son ingeridos. Parece que en el caso del "sexpunctata" la peligrosidad es ficticia. Vamos, que va de farol. Espero que no corra la voz, porque como se enteren las moscas asesinas...
   Ha estado un buen rato sobre mi mano, (la perra está estreñida) y al final antes de volver a casa le he tenido que animar a que se fuera con un pequeño empujón, (que ha entendido perfectamente) y se ha ido, no digo volando, porque eso que hace nos es volar. Se ha ido por el aire, pesadamente, hasta que se ha topado con una gramínea bamboleante y allí se ha quedado, agarrado como un poseso.
   








2 comentarios:

  1. Vaya, y yo pensando que era algún tipo de mariquita, también hice una foto a una rosa, parece que es tiempo de estos bichitos.

    Me ha gustado leerte, son verdaderos "haibuns" y las fotos una maravilla

    Besitos Unsui

    ResponderEliminar
  2. Aparte de los puntos, son más alargadas que las mariquitas
    Muchas gracias por tus piropos
    Bss
    j

    ResponderEliminar