Nube y Agua

Nube y Agua
El desapego de las nubes...la humildad del agua

martes, 19 de julio de 2011






Un resoplido.
¡Dos delfines que salen
para respirar!

   En travesía, o incluso a veces muy cerca de la costa es relativamente frecuente encontrar delfines que se acercan al barco y juegan delante de la proa. Su compañía siempre es bien recibida. En las noches oscuras es un espectáculo verlos aproximarse al barco como torpedos luminosos dejando una estela fluorescente.
   A veces en las guardias nocturnas, algo tediosas, un resoplido  en la oscuridad, cerca del barco indica la presencia de un delfín que te acompaña horas, a la misma velocidad, sin alejarse de la timonera rompiendo la soledad de la guardia. No tienen mucha conversación, pero eso no es óbice para que  se cree una gran comunicación .
   El mítico navegante solitario Bernard Moitessier cuenta que en la primera regata de vuelta al mundo, en solitario y sin escalas, cerca de Nueva Zelanda, debía rebasar unos peligrosos arrecifes en medio del océano. La navegación en el año 68 del pasado siglo se hacía con sextante y cronómetro, lo que implicaba la posibilidad de un error, de unas pocas millas, pero que al no tener cerca referencias costeras era in detectable y en el caso de los arrecifes podía ser fatal. Un grupo grande de delfines se acerco al barco y se pusieron delante de él. Salían del agua todos a la vez y hacían un giro haca estribor, (en lenguaje terrícola, la derecha), así estuvieron bastante rato hasta que Bernard comprendió que le estaban intentando decir algo, por lo que decidió seguir el rumbo que le marcaban. Poco después pudo oír y ver el oleaje que se formaba en los arrecifes, hacia los cuales se hubiese dirigido si no hace caso de las señales de los delfines.
   No sé si es verdad. Yo no estaba allí, (la regata era en solitario), pero me lo creo.

6 comentarios:

  1. Aquí también se ven los delfines acompañando a los barcos y es una experiencia inolvidable. Gracias por compartir la experiencia de Bernard Moitessier y estos maravillosos animales.

    Un beso.

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  2. Si has tenido la experiencia de verlos, durante horas, saltar y cruzarse delante de tu proa ¡tienes que creerlo!
    Un abrazo.

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  3. Aupa Julio, buena experiencia la de los delfines, por el Cantábrico es menos frecuente pero se dá tambien. Un abrazo

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  4. Gracias Carlos por tu comentario.
    Este verano no me extrañará que veas algunos...
    Son bastante frecuentes por esa zona incluso muy cerca de tierra
    Un fuerte abrazo
    j

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