Nube y Agua

Nube y Agua
El desapego de las nubes...la humildad del agua

sábado, 6 de febrero de 2010

HORIZONTE

    Vivimos la mayor parte de nuestra vida entre cuatro paredes. Cuando salimos a la calle, nuestra vista está limitada por los edificios cercanos. No vemos habitualmente el horizonte.
  Nos movemos en un mundo limitado por lo que abarca nuestra vista, que es más bien poco y cercano, pero detrás de nuestras paredes y edificios, hay todo un mundo.
     Por experiencia propia sé que cuando salgo fuera de ese mundo limitado al que creo pertenecer y puedo ver el horizonte, el cielo, las nubes, las puestas de sol, mi estado mental mejora. Mejora sensiblemente. La vida no acaba en la pared o el edificio de enfrente. Pertenezco a un entorno mucho más amplio, ilimitado.  Entonces mis problemas, mis manías, mis ambiciones, mi pequeño-gran ego se empiezan a reducir, a disolver hasta que alcanzan su verdadera dimensión, que es  realmente muy pequeña. Acabo comprendiendo que pertenezco a un gran escenario y que mi lugar en él no es mucho mayor que un olvidado grano de arena. Y cuanto menos soy... más feliz me siento. 

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