No se si notan algo discordante en la foto... Si se fijan bien verán a un señor de cierta edad, vestido de rojo, en bermudas, saludando a otro, de más avanzada edad, con un bastón, entre un grupo de señores trajeados y encorbatados.
El señor de rojo, es D. Emilio Botín, banquero y el del bastón, al que está saludando es D. Juan Carlos de Borbón, todavía rey de España, por "una gracia" de dios
No tengo grandes conocimientos de esto del protocolo. A lo mejor soy una tanto mal pensado, propicio a caer en teorías conspiranoicas, pero a mi me parece que D. Emilio se ha saltado el protocolo. Diría más, el recibir a su majestad, (que no la mía), de esta guisa tan informal se podría considerar una falta de respeto hacia la figura del rey, (respeto que dicho sea de paso, él y su familia, parecen empeñados en perder a marchas forzadas).
Hay otra opción y es que D. Emilio, está por encima de la figura del rey y por tanto se puede permitir estas libertades protocolarias, hacia un inferior.
Es de agradecer que con este gesto, se ponga de manifiesto, de forma meridianamente clara quién manda en España.
El trato de favor que la hacienda pública ha tenido en varias ocasiones con D. Emilio al olvidarse éste de declarar unos ahorrillos fiscalmente opacos, ya hacía pensar que tenía un cierto poder, por encima de los gobiernos de uno y otro lado, pero con este gesto, ha quedado claro que el rey, ese gran cazador de elefantes -y "gacelas"- también esta a sus órdenes
Todos los que me conocen saben que tengo una cuestión personal con Botín que, si pudiera, arreglaría de una forma poco apropiada. Muy poco apropiada. Lo peor es que suelo encontrarme cerca gente que le admira por su "inteligencia" (que yo nombro de otra manera mucho más fea).
ResponderEliminarsaludos, j. Te agradezco la entrada porque lo deja todo bien clarito. Como siempre.
Yo no conozco a ningún malvado que sea tonto.
ResponderEliminarSon listos, listísimos, diría yo, pero no son "totalmente listos", como ellos se creen.
Si fueran "totalmente listos" verían claro que por ese camino no se va a ninguna parte, verían los daños colaterales que producen su codicia, su obsesión por ser el más grande y como de alguna manera esos daños, en algún momento revertirán sobre ellos.
Avísame si decides un día arreglar el asunto que tienes con él... no disfrutes tu sola.
Bsss
j
Ay ay...miedo me dais Ane y Unsui con ese asuntito.
ResponderEliminarAbracitos a ambos
Miedo, lo que se dice miedo lo deberían dar estos pájaros. Pero no hay que arrugarse. Somos nosotros los que sin darnos cuenta los alimentamos
ResponderEliminarBsss
J