Obtenido de postcarboinstitute
Eso que llamamos orgullosamente "civilización" se ha basado en los combustibles fósiles, (carbón, petróleo y gas licuado). El crecimiento de la población, la prolongación de la vida humana, la salud, el desarrollo tecnológico, la alimentación, los transportes... hasta las llamadas energías alternativas y la misma energía nuclear, están basadas en ellos. Los hemos utilizado pensando que sus reservas eran infinitas, tan infinitas como nuestras necesidades y caprichos que hemos ido creando.
Pero resulta que vivimos en un planeta esférico, más concretamente, sobre una delgada capa de él, donde se almacenan las ¡ay! limitadas reservas, y resulta que ya hemos extraído el 50% del petróleo convencional y nos acercamos también a ese valor en el gas natural y el carbón.
No hay peligro que acabemos con ellas. Porque llegará un momento, cuando extraer una unidad energética cueste una unidad energética, que no podremos extraerlas. En un mundo basado en estos productos, esto
supondrá un gran problema, de efectos casi inimaginables. Pero no hace falta esperar a que llegue ese momento.
Conforme la tasa de retorno energético decrezca el precio y los problemas, (como los que ya estamos sufriendo), irán aumentando... más deprisa de lo que pensamos...
supondrá un gran problema, de efectos casi inimaginables. Pero no hace falta esperar a que llegue ese momento.
Conforme la tasa de retorno energético decrezca el precio y los problemas, (como los que ya estamos sufriendo), irán aumentando... más deprisa de lo que pensamos...
Y cada vez las grandes superficies, áreas comerciales, tiendas etc.. llenos a rebosar de productos que no sirven para nada, o casi. Derrochamos energía y materias primas como si fueran inagotables...
ResponderEliminarUn abrazo "J".
Pero los productos inútiles están ahí porque los compramos. Somos el "engranaje cómplice"
ResponderEliminarUn abrazo Angel
J