Sobre Murcia hay una situación de fuerte inestabilidad atmosférica propicia para la formación de unos preciosos Cúmulus Congestus que crecen por doquier en altura y que a la tarde formarán tormentas puede que con granizo
Es curioso dedicar un post a las nubes de Murcia si no es precisamente para apuntar a esa materia inestable, proteica, gaseosa, posible expresión del ego como algo cambiante e ilusorio. En este caso, además las nubes tienen una belleza extraordinaria. Siempre me digo cuando las miro que son tan normales que apenas les damos importancia. Y a la vez son formas de una complejidad y estructura maravillosa. Me gustaría vivir en algún sitio donde las pudiera ver al atardecer. Me gusta salir a caminar entre otras cosas para verlas.
Siempre me han producido fascinación las nubes, sobre todo en mis largos años de vuelo a vela. Su conocimiento ayudaba mucho a encontrar ascendencias y a huir de posibles tormentas. No les damos importancia porque son frecuentes. Si fueran un fenómeno que tuviese la frecuencia de una vz cada 30 años las consideraríamos mucho más. Para mi es uno de esos espectáculos fascinantes que ofrece la naturaleza si se las mira con "mente de principiante" y que además suelen estar muy a mano casi todos los días. Coincido contigo en la analogía con el ego, imponente, impetuoso, ¡tan aparentemente real!, tan cambiante ... y tan efímero Por ciero esta tarde las "coliflores" soltaron una buena granizada Un fuerte abrazo j
A mi me pasa algo parecido... De hecho tengo acuñado un término "nubegancia" para definir una acividad, muy poco activa que consiste en mirar el paso de las nubes, sin hacer nada. Un abrazo j
Es curioso dedicar un post a las nubes de Murcia si no es precisamente para apuntar a esa materia inestable, proteica, gaseosa, posible expresión del ego como algo cambiante e ilusorio. En este caso, además las nubes tienen una belleza extraordinaria. Siempre me digo cuando las miro que son tan normales que apenas les damos importancia. Y a la vez son formas de una complejidad y estructura maravillosa. Me gustaría vivir en algún sitio donde las pudiera ver al atardecer. Me gusta salir a caminar entre otras cosas para verlas.
ResponderEliminarSaludos.
Siempre me han producido fascinación las nubes, sobre todo en mis largos años de vuelo a vela. Su conocimiento ayudaba mucho a encontrar ascendencias y a huir de posibles tormentas.
ResponderEliminarNo les damos importancia porque son frecuentes. Si fueran un fenómeno que tuviese la frecuencia de una vz cada 30 años las consideraríamos mucho más. Para mi es uno de esos espectáculos fascinantes que ofrece la naturaleza si se las mira con "mente de principiante" y que además suelen estar muy a mano casi todos los días.
Coincido contigo en la analogía con el ego, imponente, impetuoso, ¡tan aparentemente real!, tan cambiante ... y tan efímero
Por ciero esta tarde las "coliflores" soltaron una buena granizada
Un fuerte abrazo
j
Nunca olvidaré la sorpresa que me produjo enterarme de lo que puede llegar a pesar una nube.
ResponderEliminary encima flotan!! ¿No es un milagro?
EliminarUn abrazo
j
por Palma tenemos este mismo cielo, y he fotografiado estas nubes que parecen acercarse a los tejados.
ResponderEliminarsaludos
Estos días de inestabilidad son un regalos para los "nibegantes"
EliminarBss
j
¡Vaya fotazas! Me encantan las nubes, hasta en foto. Y luego dicen que siempre estoy en las nubes...
ResponderEliminarhttp://surimidala.blogspot.com.es/2007/11/nefelibata.html
:D Un abrazo tomodachi
A mi me pasa algo parecido... De hecho tengo acuñado un término "nubegancia" para definir una acividad, muy poco activa que consiste en mirar el paso de las nubes, sin hacer nada.
ResponderEliminarUn abrazo
j
Oh qué bellísimas nubes, bellísimas fotos, gracias JJ
ResponderEliminarUn abrazo